Manolo lleva más de tres meses tomando actimel a diario, y no ha notado ningún cambio en los hábitos que tenía. Sigue estando en el paro, bebe cervezas con los amigos, fuma, no va al gimnasio, se enfada por tontadas, es grosero y altanero. Se siente estafado. Busca personas para fundar una sociedad de no afectados por el actimel, que como a él, no les haya servido más que para tirarse algún pum que otro.

El Fragatino ha declarado “Me fié, porque vi a Dani Rovira anunciar el producto. Es tan gracioso. El dice que bastan 21 días para cambiar un hábito. No lo creía capaz de mentir por dinero. También es verdad que como hace tantos anuncios, alguna vez se la tienen que clavar. Yo llevo tres meses bebiéndolo por las mañanas, y a parte de que no me ha cambiado la vida, lo de alimentar sonrisas, una puta mierda. Se lo di a un guardia de tráfico para que no me multara por saltarme un stop, y me detuvo por intentar sobornar a un agente de la ley. Encima se lo tomó como prueba y le sentó fatal poniéndome la sanción más alta. Lo de cambiar hábitos lo «ha vito tú.» ”

Ha contratado un notario para dar fe de los que se ha bebido porque guarda los envases de pvc, que por cierto, dice que contaminan, y poder denunciar a la marca por falsas promesas y publicidad engañosa.